Abordando la valoración de la prueba, expresa que en atención a las particulares características de la prueba electrónica, su ofrecimiento, producción y ponderación deben, necesariamente contemplarse a través de un sistema más permeable; "en especial, que tenga como estandarte a los principios procesales y valores vinculados a la cooperación, a la solidaridad y a la búsqueda de la verdad jurídica objetiva".
Critica la actitud del demandado sobre quien pesaba la carga de desvirtuar el contenido de aquella, no debiendo limitarse a una mera negativa de los hechos sino que debía adoptar una conducta más solidaria con el proceso, considerándola poco cooperativa. Destaca que el dominio y eventual administración y disposición de la información se encuentra en poder de una sola de las partes de la relación procesal, siendo de aplicación la teoría de las cargas procesales dinámicas.
Considera que el valor probatorio del acta notarial, se ha visto corroborado por otra serie de indicios serios y concordantes que permiten tener por cierta la publicación objeto del proceso.
El fallo completo, en este LINK:
